Ayer jueves 5 de diciembre en punto de las 6 de la tarde, personas se reunieron en la explanada de la Expo Guadalajara para exigir soluciones a la creciente crisis de vivienda que afecta a la ciudad. “Vivienda Posible” buscó visibilizar los problemas derivados de la falta de acceso a una vivienda digna y accesible, agudizados por la proliferación de alojamientos temporales como Airbnb.
El evento inició con una representación teatral que dramatizó la tensión entre inquilinos y arrendadores, destacando las injusticias y desigualdades que enfrentan los ciudadanos. A través de esta interpretación, se evidenció el impacto negativo de la expansión desmedida de las plataformas de alquiler a corto plazo, lo que ha provocado el encarecimiento de las rentas y el desalojo de muchas familias.
Posteriormente, los organizadores presentaron una serie de demandas concretas, incluyendo la propuesta de diez políticas públicas que buscan acabar con esta crisis. Entre las soluciones planteadas destacan:
- Garantizar el acceso al derecho de una vivienda adecuada y accesible.
- Cumplir con el apoyo a las rentas de los sectores más vulnerables y los hogares desplazados.
- Detener los desalojos forzosos.
- Establecer una ley inquilinaria que regule y controle los precios de las rentas.
- Implementar políticas fiscales que incentiven la construcción de viviendas sociales.
- Mejorar la gestión del suelo urbano.
Esta manifestación cerró con una invitación abierta para que los asistentes compartieran sus experiencias personales relacionadas con la crisis de vivienda. A través del micrófono para narrar sus historias, o utilizando el hashtag #Siquisieranpodrían a través de redes sociales.
La manifestación “Vivienda Posible” destacó la urgencia de atender el problema habitacional en Guadalajara, recordando que el derecho a una vivienda digna no es un lujo, sino una necesidad básica que debe garantizarse para todos y todas.
